El lubricante es como el queso, con él todo entra mucho mejor. ¿Que te ha quedado un poco insípido? Queso. ¿Que te apetece darle un toque especial al plato? Queso. ¿Que quieres practicar sexo anal y que todo vaya como la seda? No, aquí el queso mejor dejarlo en la nevera. Para estos casos nada mejor que el lubricante a base de agua de Platanomelón. Sí, sí, has leído bien: DE-A-GUA. Gracias a su fórmula y a su textura densa logra una lubricación ultraduradera y suuuuuper-placentera. No es graso, no mancha y es, incoloro, inodoro e insípido. Todo lo bueno de un lubricante a base de agua ¡con todo lo que necesitas de un lubricante anal! Y como siempre, la mejor relación calidad-precio de los productos de Platanomelón. ¿Acaso se puede pedir más?
Pim, pam, ¡toma lubricante anal! Gracias a su práctico dosificador no tendrás que perder ni un segundo en desenroscar ni abrir complicados envases. Con una sola mano, en un simple “pim, pam” podrás aplicar el lubricante anal de Platanomelón sin que nada te corte el rollo. El dosificador lleva un sistema de seguridad, que con un sencillo giro se bloquea evitando posibles derrames, ¡para que puedas llevarlo contigo a todas partes! Además, te aconsejamos, que antes de nada, agites el envase para que funcione correctamente el dispensador!
Además, como tiene una base de agua, es compatible con látex y juguetes de silicona. Otro detalle importante es que no contiene efecto relajante ni anestésico y, logra ese efecto duradero y placentero gracias a su textura densa. Sin duda, el aliado perfecto para tener un desliz (en el buen sentido) con final feliz.
Este producto NO contiene el componente kathon CG.